Marca Personalizada en Honduras
La revolución industrial marca un punto de transición del comercio, enfocado principalmente en la maximización de la producción, la cual hoy en día nos presenta una masiva producción superior a la capacidad de consumo y una sutil capacidad del mercado para ofrecerme eso que habíamos estado buscando. ¿Cómo lo hacen? ¿Acaso somos más consumistas y queremos adquirir todo lo que vemos en los comerciales? o ¿el comercio sabe algo de mí específicamente?
Cada día las empresas buscan formas de proporcionar productos y servicios más ajustados a las necesidades de sus consumidores a fin de brindar experiencias más agradables que fomenten la fidelidad de sus usuarios. El análisis de Big Data que las empresas logran mediante la recopilación de datos de los consumidores, permiten que los usuarios experimenten servicios más acorde a sus necesidades y preferencias.
Éste condensado de información se obtiene de una red de conexiones y valoraciones de datos, mismos que nosotros como consumidores proporcionamos al comercio. A medida alimentamos bases de datos para compras en línea, compartimos nuestra opinión sobre un determinado servicio o exponemos información que nos identifica como consumidores, se va retroalimentando la Big Data y con ello vamos estrechando el mercado en el cual nos encontramos navegando día a día. En múltiples ocasiones esta información nos proporciona datos que son de nuestro interés, sin embargo hasta años recientes se han venido a considerar ¿quién está manipulando mi información?, ¿dónde está mi información?, ¿qué tanto saben de mí y para qué?
Estas y muchas otras interrogantes han dado lugar a la creación de marcos legales internacionales y locales para asegurar la protección de datos personales. Actualmente una de las principales consideraciones respecto a estas leyes recae en las empresas que se dedican a la recopilación de datos para luego analizarlos y con ello promover estrategias comerciales oportunas. Es importante considerar que la Ley de Protección de Datos no es un mecanismo de prohibición de recolección de datos, sino que establece el proceso y responsabilidad que corresponde a la recolección de datos personales, siendo algunos tan sensibles como nuestros pines de tarjetas de crédito, y otra más arraigada como la seguridad de nuestras comunidades, que ha estado expuesta en alguna parte.
En Honduras aún se encuentra en revisión el marco legal que regulará el proceso de recolección de datos y las cláusulas que deberán ser proporcionadas a la población, así como las medidas de seguridad y responsabilidades que deben manejar aquellos que recopilen datos de personas naturales o jurídicas, nacionales o extranjeras dentro o fuera del territorio nacional.
Graciela Cruz Raudales
Asociado Senior
García & Bodán
Honduras