FCPA, Anticorrupción y Compliance en Guatemala y El Salvador
FCPA, Anticorrupción y Compliance en Guatemala y El Salvador son temas de suma importancia y de los cuales se desconoce el impacto y la necesidad de prevenirlos tanto en normativa internacional (como FCPA) como local, aplicable tanto a empresas privadas (sin importar el tamaño), como públicas.
Foreign Corrupt Practices Act (FCPA) es una ley que prohíbe a las compañías de Estados Unidos o a cualquiera de sus subsidiarias, independientemente de dónde estén ubicadas sus operaciones y sus empleados, el propiciar directa o indirectamente el soborno a funcionarios públicos en el extranjero con el fin de beneficiarse de esta acción.
Es obligación de todas las personas y empresas conocer lo que ocurre en el desarrollo de los negocios. Es entonces recomendable que cuenten con un programa de cumplimiento efectivo, en donde se desarrollen políticas corporativas, códigos de ética, guías disciplinarias, entre otros. Esto asegura la reducción del riesgos de caer en prácticas corruptas. Igualmente, es indispensable contar con un monitoreo permanente que permita evaluar constantemente el Programa.
García & Bodán Guatemala junto a la firma local, Asensio Andrade Flores & Asociados, la Cámara de Comercio Guatemalteco Americana (AmCham); así como García & Bodán El Salvador junto a la Cámara Americana de Comercio de El Salvador (AmCham), ambas oficinas con el apoyo de la firma internacional Miller & Chevalier, llevaron a cabo conferencias el pasado mes de mayo.
La Conferencia trató sobre los efectos de la nueva legislación en contra de prácticas corruptas y cómo gestionar los riesgos. El objetivo principal fue brindar una perspectiva centroamericana sobre las regulaciones estadounidenses. También dar a conocer las leyes norteamericanas de anticorrupción en las diferentes materias y el impacto que tienen estas leyes en compañías internacionales operando en Guatemala y El Salvador. La metodología teórica- práctica permitió analizar algunos casos de empresas ya sancionadas, así como las posibles acciones de corrupción y distintas responsabilidades a las que las empresas pueden estar expuestas.
“Resaltamos la importancia de contar con un Programa de Cumplimiento objetivo, realista y personalizado, e identificar las áreas de la empresa de mayor riesgo para focalizar los esfuerzos. Las empresas deben de contar con programas de capacitación para todo el personal para lograr una efectividad en su desarrollo, y finalmente un monitoreo constante y permanente del programa, acompañado de una auditoría externa”, indicó María Mercedes Castro, Asociado de García & Bodán Guatemala.
